Llegaste... Entraste a mi vida.
Mi corazón te necesitaba
de una manera insaciable.
Mi pecho te pedía a gritos,
mis labios tu boca buscaban,
mis ojos con los tuyos soñaban,
los susurros de la noche
te nombraban y gritaban cómo te amaba,
este corazón enamorado.

¡Te amo, vivir sin ti no puedo!
La alegría que me da tu amor
me lleva a estremecerme
y abrigo un inquieto deseo
que llegue aquel día en que verte ya pueda
y
regalarte mil "te quieros"
cada segundo de mi vida.
Me pierdo al no sentirte, amor mío.
Mis suspiros los envío con amor al cielo,
y que
bajen como dulces cascadas a tus labios,
y entre besos y besos sólo te digo:
"¡Te quiero, te quiero!"
Corazón mío, enteramente tuyo,
mi dulce amanecer, mi más bello anhelo.
¡Cómo deseo ahora mismo abrazarte!
Compartir contigo mis noches y días.
Palabras brotan de mi propia boca
que tan sólo te piden amor y más amor,
de aquel que sólo tú me sabes dar.

Nuestros románticos sueños ya
no caben en nuestros pechos.
Sólo somos ansias y amor puro,
sólo sómos dos enamorados corazones
que no saben otra cosa más que amarse
y con nuestro sentir declarado
todo el mundo hoy debiera aprender a amar...
¡así como hoy te amo yo a ti!
© autor: Shoshan / Noviembre / 25 / 2009